Sobre Finca Rancho Grande

Crecí escuchando de boca de mi padre y de mis tías las historias de cómo mi bisabuela y mi abuela también habían crecido rodeadas del mundo del café y como ellas manejaron un beneficio y sus propias fincas. El legado de perseverancia y trabajo duro en la tierra recorrió 4 generaciones hasta llegar a mi padre, Rene Molina Urrutia, quien con su conocimiento sobre el cultivo y su dedicación a la finca logró sembrar en mí la semilla de curiosidad y amor por el cultivo de café.

La innovación siempre ha estado presente en nuestra familia, así como el sentido de conservación del medio ambiente y, junto a mi padre, logramos hace 10 años materializar un proyecto que nos permitió realizar la creación de un beneficio compacto, ecológico y cero desperdicios, que nos permitiera: 1) procesar de manera eficiente el café; 2) poder garantizar la trazabilidad; 3) poder controlar la calidad en cada proceso por el que pasa el café y a la vez proteger el medio ambiente, creando también un tren de proceso para los residuos que resultan del proceso del café.

Todo esto se logró al adquirir pulperos ecológicos de bajo consumo de agua, una secadora de Guardiola, una trilla con seleccionadora densimétrica, una tostadora de café, el molino y la selladora para completar el proceso. Por este motivo, para lograr llevar a cabo la administración, me enfoqué en aprender sobre cómo utilizar cada una de las máquinas para establecer tiempos y optimizar recursos, participar en capacitaciones en el área de tostado y catación y aprender a procesar los desperdicios que se generan para poderlos aprovechar y generar subproductos, así como el abono orgánico a base de Lombrices Rojas Californianas, quienes digieren la pulpa y aguas mieles del café para producir uno de los abonos más ricos en nutrientes, capaz de restituir el suelo. Asimismo, los paneles solares y la recolección de aguas lluvias también forman parte de nuestro proyecto de autosostenibilidad, permitiéndonos aprovechar al máximo los recursos que proporciona la naturaleza.

De esta forma, nuestro beneficio compacto, ecológico y autosuficiente, con la característica de ser un beneficio “cero desperdicios”, recibe cada año la cosecha de Finca Rancho Grande, la cual está ubicada en Tepecoyo, La Libertad a 1100 metros sobre el nivel del mar y posee 19 manzanas de extensión, cuyas laderas dan vida a las variedades Bourbon, Cuscatleco y Catimor. El complicado acceso y las calles de tierra colaboran para que al llegar a la finca se valore la belleza de un nacimiento de agua, árboles de diferentes especies, entre los cuales resalta el árbol de Bálsamo, que rodean cada rincón que la vista puede apreciar y la diversidad de aves que acompañan y alegran con su melodía. Todos estos factores permiten que Rancho Grande posea un paisaje cautivador e inigualable en todos los sentidos.

La sostenibilidad de Finca Rancho Grande y nuestro beneficio de café se mantienen fuerte gracias a una base sólidaconstituida por los valores de respeto al medio ambiente y conservación, trabajo en equipo, pasión, perseverancia y amor por cada proceso. La gratitud por el café y por la naturaleza han creado en mí el deseo incansable de poder seguir aprendiendo y continuar este proyecto familiar que se ha convertido en la razón de todo nuestro esfuerzo y dedicación para lograr crecer hacia el mundo de los cafés especiales y así poder exaltar el nombre y calidad del café salvadoreño y todo lo que su tierra es capaz de ofrecer.